Longboard Pharmaceuticals tiene previsto poner en marcha en Estados Unidos a principios del próximo año un ensayo clínico de fase 1b/2a que evaluará la terapia potencial LP352 en adultos con síndrome de Dravet y otros tipos de encefalopatías epilépticas y del desarrollo, como el síndrome de Lennox-Gastaut, la esclerosis tuberosa y el trastorno por déficit de CDKL5. Según hemos podido conocer por parte de la empresa, el ensayo probará la eficacia de la terapia para disminuir las crisis epilépticas en pacientes adultos y, de obtener resultados positivos, también en pacientes pediátricos en un análisis posterior.
LP352 está diseñado para modular la actividad de una molécula de señalización en el cerebro llamada GABA, y así reducir la actividad anormal del sistema nervioso que caracteriza a las crisis epilépticas. “Creemos que LP352 tiene el potencial de reducir las crisis en una amplia gama de epilepsias graves y devastadoras, resistentes al tratamiento, y esperamos avanzar en el programa en los pacientes que viven con estos trastornos debilitantes”, ha dicho el Dr. Phil Perera, Director Médico Jefe de Longboard, en un comunicado de prensa el pasado 8 de septiembre.
El LP352 es un medicamento oral que activa un receptor proteico de la serotonina denominado 5-HT2c. Recordaréis este receptor porque ya hablamos de él en nuestra publicación del pasado 27 de septiembre (podéis recuperarla AQUÍ), y porque otros fármacos como la fenfluramina o la lorcaserina ejercen parte de su efecto a través de su interacción con 5-HT2c. ¡Sí, parece que son varias las empresas que están trabajando en controlar los efectos del síndrome de Dravet a través de la regulación del 5-HT2c!
En su presentación corporativa, la cual encontraréis AQUÍ, Longboard presenta LP352 como la “lorcaserina de nueva generación”, con mayor selectividad y especificidad sobre el receptor 5-HT2c que otros fármacos, lo cual parece limitar los posibles efectos adversos derivados del uso de este tipo de medicamentos, como pueden ser el riesgo de valvulopatía e hipertensión arterial pulmonar o el insomio.
En un ensayo clínico de fase 1 recientemente finalizado se probó el LP352 en voluntarios sanos, con 83 participantes a los que se administró una o varias dosis del medicamento o un placebo. El objetivo principal era evaluar la seguridad y la tolerabilidad del LP352 en personas.
Los resultados fueron positivos: en la parte del ensayo correspondiente a las dosis múltiples ascendentes, en la que los participantes recibieron varias dosis a lo largo del tiempo, la mayoría de los efectos secundarios o adversos notificados fueron de gravedad leve o moderada. El efecto adverso más frecuente fue el dolor de cabeza. Se notificó un acontecimiento adverso grave, de ansiedad, en un participante que recibió la dosis máxima prevista de LP352. En general, el perfil de seguridad del medicamento en investigación fue coherente con los efectos esperados de un medicamento que actúa activando el receptor 5-HT2c.
También hay que destacar que los participantes en el ensayo mostraron aumentos de prolactina dependientes de la dosis y la exposición. En otras palabras, los participantes que recibieron dosis más altas de LP352, o que recibieron la medicación durante más tiempo, tuvieron niveles más altos de prolactina en sus cuerpos. La prolactina es una hormona conocida por promover la lactancia. El aumento de los niveles de prolactina con dosis y exposiciones más altas de LP352 sugiere que el medicamento está activando los receptores 5-HT2c en el cerebro como se pretende, según Longboard. “Nos alientan las características iniciales de seguridad y tolerabilidad de LP352 observadas en el ensayo y el hecho de que parezca tener un efecto potente sobre la vía 5-HT2c”, dijo Perera.
Podéis leer la nota de prensa original de Longboard Pharmaceuticals, en inglés, AQUÍ.
Un sueño, una meta